A veces cuesta expresar con palabras las cosas bonitas, y cuando son tannnn bonitas da hasta respeto plasmarlo solo en unas líneas. Con ellos, hoy, la responsabilidad es grande. Sin saberlo, nos hicieron un regalo, porque su boda para nosotras fue justamente eso: ¡un auténtico regalo!

Tati llegó a nosotras con esa sonrisa que tanto le caracteriza, una tía con las ideas claras, con muchísimo rollo y con ganas, muchas ganas, de hacer algo bonito, cuidado, y sobre todo divertido. Ella llegó, y casi sin darnos cuenta, consiguió que al irse ese mismo día, ya le quisiésemos. Hay gente que atrapa, y ella, sin duda, lo hace.

Cuando conocimos a Raúl, lo entendimos todo. Son tan iguales y tann diferentes a la vez que son perfectos. Su amor, en directo, uno de los más bonitos que hemos vivido.

Ambos lucieron dos pedazo de looks. Raúl no podía ser un novio cualquiera, y con Juan de Scalpers, mano a mano, consiguieron el toque perfecto para el gran día.

Tati, delicada pero rompedora. Romántica y con un punto diferente y tan ella que no podía estar más bonita. Clásica en tejido, y moderna en complementos. Sin lugar a dudas, una mezcla que solo ella podía defender como lo hizo. Estaba… ¡mucho más que espectacular! Su modelo de White love atelier y su tiara de M de Paulet fueron sin duda sus complementos perfectos.

¿Su ramo? Uno de los más especiales que hemos tenido. Ella no quería un ramo cualquiera, de hecho su primera opción fue llevar una única flor como ramo, pero después de una reunión conjunta con el equipo de Flowers&Co la propuesta de Izaskun del ramo de nardos ¡le enamoró!

Esta flor, también fue parte del ramo que lucieron sus damas de honor. ¡Qué recuerdos de la mañana tan bonita que vivieron las 5 juntas!

La boda tuvo lugar en Palacio Ubieta. Un lugar mágico, que nosotras estrenamos el 1 de Julio de 2017, y que no puede ser más maravilloso. Yoyi, su dueña, es… ella lo hace todo fácil, siempre nos cuida muchísimo y juntas disfrutamos muchísimo de ellos, de su gente y de su boda de principio a fin.

Xabi Vide a cargo de las fotografías, Visión Alternativa al mando del vídeo, Penny Lane poniendo música a una fiesta memorable, Kiribox regalando momentos divertidos, y Jairom Black poniendo ese toque mega especial a su ceremonia, su cóctel y siendo cómplices ¡de un divertido momentazo! ¡Batukada!

Una ceremonia civil en el jardín de Palacio Ubieta mucho más que emotiva y personal. Tati y Raúl aparecían juntos, montados en su bicicleta, después de un first look de los más emocionante, y arrancando las sonrisas de sus familiares y amigos desde el primer momento.

Sus votos y las entrañables palabras de sus seres queridos hicieron que todas las piezas del puzzle encajarán a la perfección desde el primer minuto.

En el cóctel, además de disfrutar de la genial puesta en escena de Maher catering, montamos una maravillosa verdulería, y vivimos momentos de risas y bailes que nos hicieron saltar con ellos de emoción.

Su seating plan, al igual que el resto de la boda tenía toques boho, pero con mucha fuerza y sin perder un ápice de romanticismo. Beige, granate y azul. Esa fue la paleta de colores de su boda, con una base de verdes ¡por supuesto! Y la que se mantuvo de principio a fin en toda la decoración. Una vez más, Bego Viñuela de Caligrafía Bilbao fue la encargada de ponerle sus maravillosas letras a nuestro diseño.

El banquete se celebró en el interior del Palacio. Combinamos mesas de madera vista alargadas, con mesas redondas manteladas. Copas talladas azules, bajo manteles de rafia y techo central con verdes. En ese comedor vivimos momentos muy pero que muy emocionantes que no vamos a olvidar ¡nunca!

¿Y en la fiesta? En la fiesta disfrutamos con su clase de swing para todos los invitados, de la marcha de los amigos de ambos, y de sus incansables ganas de darlo todo en su gran día.

No faltaron los detalles para sus invitados, y por supuesto una candy bar que hizo las delicias de los más golosos 😉

Era San Juan, y una hoguera y chocolate con churros acompañados de una batukada que aparecía de manera inesperada para todos, pusieron el broche perfecto a una boda que nos regaló un recuerdo maravillosos y unos amigos para siempre.

¡Os adoramos chicos! En nuestra ofi tenéis vuestra casa ¡siempre!